Es lo que pasa con tanto libro y
tanta película: que el prólogo (esta vez titulado Chez Modiano y debido a José Carlos Llop, es, como un apabullante tráiler
que mejora a la película, que mejora al libro. Pero tampoco nos engañemos. En
este volumen, en cuanto trilogía, hay tres novelas. Muy mala la primera, muy
buena la segunda, salvable la tercera. Dice Llop que cuanto se publica en el
mundo, aunque sea en internet, acerca de Modiano termina en la red en el
Diccionario Modiano que nada deja escapar. Un destino que no quisiera para este
comentario.
Porque la primera novela aquí
incluida, El lugar de la estrella es
una memez posmoderna de la que sólo salva que está datada en la proto-posmodernidad.
Un ingenioso artilugio que te hace esforzarte, ser paciente, ponerte en modo
lector automático. Un texto lleno de ruido y de furia, trufado de buscado
antisemitismo para delatar la barbarie de esa actitud. Y poco más. Una novela
que no lo es, que se convierte en un chiste largo y sin gracia, un sketch de
José Mota para académicos esquizofrénicos. Algo malo, tramposo, desesperante. Estúpido.
Lasciate ogni speranza…
La segunda, La ronda nocturna, habla del París ocupado y a punto de llegar los
nazis, un mundo alucinado de arribistas, de traidores y de patriotas, una
historia de identidades ocultas, de gente que se persigue a sí misma y de sí
misma huye. Sobresaliente de estilo y de tensión, es lo único, o casi, que hace
que conserve este libro en mi biblioteca, sabedor de que alguna vez volveré a
sólo estas páginas.
Swing troubadour:
una canción que suena eficazmente
en La ronda nocturna
La tercera, Los caminos de circunvalación, se asemeja más a la anterior, pero
no llega ser tan perfecta. Comparece aquí el padre judío del autor, convertido
en personaje al que su hijo, narrador y autor, observa con lejana compasión.
Sumergido en la pesadilla nazi, lo vemos disimular, simular y sobrevivir mientras
vive en la inestable incertidumbre. No es una buena novela. Pero no es mala
tampoco. No se pierde el tiempo, no se pierde la paciencia. Lo cual es mucho.
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