Otras dos delicias de King: El cuerpo y El método de respiración. La primera es conocida por la película Stand by me (Rob Reiner, 1986). En este caso, es el viaje de maduración (es demasiado fácil e inexacto llamarlo iniciático) de un grupo de adolescentes para ver el cadáver de otro muchacho que fue arrollado por un tren. El camino estará lleno de incidencias menudas narradas con cariño y mucha introspección por uno de los chicos, Gordon Lachance, que ya por entonces es escritor en ciernes, y del que se inserta un relato, Stud City, redactado años después, lleno de talento y madurez. Saber al final que los demás compañeros de excursión morirían por diversas circunstancias en su juventud y madurez realza la nostalgia del narrador, tras el que no es difícil ver al propio King y que a la postre se siente extraño por no haber compartido ese destino injusto de sus viejos amigos.
Método de respiración es una narración dentro de otra; la de un abogado de bajo rango que descubre gracias a la confianza de su jefe un club de caballeros, a la inglesa, en el que los visitantes cuentan historias. La que el narrador transcribe en boca de otro tiene un aire victoriano y morigerado muy atractivos. Un muy buen relato largo al que le resta esplendor la brillantez de la novela breve que le antecede. En definitiva, un excelente libro que aconsejar a quienes sientan reparos de leer a King.
Una colección maravillosa! La he recomendado muchas veces cuando me han pedido orientación para empezar a leer a King.
ResponderEliminarSaludos.